De cómo una situación mala, siempre puede ser peor!!

Nos despertamos a las 5h de la mañana en Aguas Calientes, tras acabar exhaustos el día anterior por la caminata de mas de 6.30 horas hasta arriba de Waynapicchu, y sufrir por mi parte en cada gemelo, que era lo que llevaba descubierto, más de 30 picaduras de mosquito, dormíamos Colm y yo, mi compañero de fatigas irlandés al que tengo que agradecer la compañía inmensamente ya que el uno sin el otro no lo hubiésemos conseguido. A las 6 nos pusimos camino de vuelta a Santa Teresa, la intención, llegar a las 9 para poder disfrutar de los supuestos maravillosos baños termales de allí, porque a las 11, supuestamente, salía nuestro Van a Santa María, y tras las dos horas de viaje, tomar el bus a Cuzco. Efectivamente, estábamos a las 9.30 allí, y empezaron nuestras fatalidades, el conductor del van decidió que saldría a las 13h....o sea, no tomábamos el bus a Cuzco y nos tocaría pasar una noche más en lugar indeterminado, le intenté convencer de que saliera antes, y me dijo que los buses de Quillabamba también salían más tarde porque esperan a los profesores, por ser viernes, cosa razonable pero poco fiable, así que como estábamos sudados decidimos bañarnos, fuimos a los baños termales, y para nuestra sorpresa tras 25 min de caminar al sol, tras las 3 horas anteriores, nos salió un tipo diciendo que para extranjeros era 5 soles, así que nos tuvimos que volver y bañarnos junto al pueblo en el río de aguas gélidas. Por si acaso fuimos al Van a las 12 para persuadir al conductor, finalmente y por suerte, salimos a las 12.30, el viaje duro sólo 1h30min, y al llegar a Santa María tomamos el último de los 3 que pasan por allí a la misma hora, ya pensábamos que habíamos salvado los muebles, pero recién ahí comenzaba lo peor... y es que el autobús iba casi lleno.... de pollos y gallinas, campesinos que olían"diferente" por el trabajo de toda la semana, y sabíamos que la carretera no iba a ser agradable, aunque pensamos que podría haber sido peor.... desafortunadamente así fue, a las 3 horas tuvimos que parar por una a esperar a que la carretera en obras se abriera de nuevo, ya que había voladuras en la misma(foto3), sabiendo que podría ser peor, esperamos en el bus mientras los mosquitos del día anterior nos seguían masacrando, cuando retomamos viaje, por si no teníamos suficiente se despertaron dos de los bebes del bus, y no contentos con ello hicieron sus necesidades, y para nuestra sorpresa las madres decidieron cambiarlos allí mismo, así que el ambiente era cada vez peor entre gallinas, bebes, campesinos, etc... pero sabiendo que las cosas podrían ser peor lo tomamos con indiferencia. Unas horas después empezó a relampaguear, iba a ser un largo viaje si además estando en bajada en bus por el Valle Sagrado llovía torrencialmente, y aún tuvo que llegar lo peor, a las 20h y en completa oscuridad la dirección del bus se partió y nos quedamos tirados enmedio de la nada, estuvieron por largo tiempo intentando en vano arreglarlo, pero nada, en una de esas, mientras me informaba de la situación pasó un camión, entre varios lo paramos y le pedimos que nos llevara a la ciudad más cercana, Ollantaytambo, eran todavía 50 min de viaje, aceptó para nuestra fortuna, así que subí al bus y le dije a Colm que antes de que nadie se diera cuenta saliéramos de allí corriendo que la cosa pintaba para largo, así que nosotros y una pareja más nos subimos al camión y en la parte de atrás pasamos, no con poco frío, el resto del viaje hasta Ollanta.
Así que como se puede ver, la situación mala siempre puede ser peor, y más con las incertezas de viajar por aquí... pero tomándolo todo con tranquilidad y filosofía, pasa a ser una experiencia diferente más de este increíble viaje!!!!!