31 octubre, 2008

Castillos de Escocia

Uno de los grandes atractivos de este país son sus castillos, fortificaciones diseminadas por el paisaje que siempre están rodeadas de unas vistas espectaculares pero que no siempre valen la pena visitar, ya que en algunos casos están en estado muy ruinoso, supongo que son los menos, pero un castillo tan famoso como el de Urquhart(imag01), en el centro del Lago Ness, si no fuera por el pase de Castillos creado por el gobierno escocés, no tiene casi nada para ver, solo se conserva un trozo de torre pero al estar en el lugar que está, se le saca partido por las fotos y la historia que tiene el lago.

El funcionamiento del Explorer Passport es tan simple como comprarlo en el primer castillo que visites, y desde entonces y va por días, según lo que pagues puedes visitar cuantos castillos quieras, en mi caso fue el pase para 3 días por £20, muy útil puesto que visitando sólo el de Edimburgo (imag02) y Stirling (imag03) ya compensa económicamente, están Castillos como el de Kildrummy, en mal estado y otros como el de Linlithgow(imag04) que merecen la pena y también la Dallas Dhu(imag05), una destilería de Whisky histórica en la zona de Elgin, donde se encuentran casi todas las del país y de las que cabe destacar su forma de pagoda característica en el edificio que alberga el horno donde se empieza el proceso de hacer el whisky. Además también incluye visita a a fortificación mejor conservada del Reino Unido, la de Fort George, pero a no ser que estemos muy interesados en arquitectura militar de finales del XIX no es nada espectacular.

Sin duda estos tres días de recorridos por Castillos son geniales, pero también descubres otros preciosos que no están en esta lista de los pases y que son tremendamente caros, un ejemplo fue el Castillo de Dunrobin (imag06) al Norte de Inverness en las Highlands.

30 octubre, 2008

Nuevo Parlamento Escocés (Edimburgo) de EMBT

Galardonado con más de siete premios internacionales y con el honor de ser el mejor edificio de Escocia, a mi llegada a Edimburgo sabía que debía visitarlo concienzudamente. Se trata de un proyecto de EMBT, ganado en concurso en 1998 y realizado hasta 2004.
Pero no es un proyecto cualquiera(imag01), se trata de la Opera Prima y obra póstuma de uno de los mejores arquitectos españoles del siglo XX, Don Enric Miralles, que falleció realizando cada detalle de este proyecto a causa de un cáncer que ya conocía mientras viajaba a Edimburgo a dejar su personalísima impronta en un edificio que parece susurrar su nombre en cada muro de hormigón, en cada elemento significativo.
Minuciosamente detallado por él mismo hasta la locura, cuando uno empieza a pasear por el interior de esta maravilla arquitectónica se siente muy cerca del lápiz de Miralles, se percibe esa libertad de dibujo que tenía, esa visión tridimensional sobrecogedora, ese don de ver en el detalle lo más importante del proyecto, porque cada detalle hace un edificio, y en este están todos cuidados, pasamanos, sillas, muebles, ambones, escaños de diputados, alfombras y hasta cada encofrado visto de hormigón, gracias Miralles por regalarnos todo esto en un solo edificio!

El exterior del mismo tiene en cada fachada una respuesta sobrecogedora, por una de ellas sus croquis de la ciudad en el hormigón(imag02), en cada ventana la simplificación del mapa de Escocia, en la Este los ventanales-miradores para los diputados y senadores(imag03), tan típicos en los castillos escoceses pero reinterpretados magistralmente por Miralles, en la fachada principal un acceso claramente marcado por una marquesina de hormigón inmensa (imag04), unos alrededores preciosos con una trama de jardines muy al estilo de Miralles, la escala lejana muestra un edificio compacto pero diverso que se expande por un territorio que no parece tener fin(imag01).

Al interior, todo diseñado por Miralles, el hall de acceso es una concatenación de bóvedas de hormigón visto con la cruz escocesa en relieve(imag05), unas bóvedas que dirigen hacia la dirección que Enric nos quiere mostrar, el patio central del edificio que solo se puede visitar con la guía es alucinante, y la sala parlamentaria principal abrumadora(imag06), es una pena no poder ver algunos de los despachos, y que la visita se quede tan corta, pero bien merece la pena pasarse por esta joya de la arquitectura española en el extranjero, porque de ahí se pueden aprender muchas lecciones de arquitectura de la buena, si Edimburgo merece la pena ya por sí sola, con este edificio incluido en su paisaje, pasa a ser una ciudad imprescindible en la formación del arquitecto. Muchas gracias Enric!.

28 octubre, 2008

Receso involuntario de un mes

Aunque parezca mentira para este blog, ya hace más de tres semanas que no logro sacar el tiempo para escribir todo lo que tengo pendiente.
Puesto que ya ha pasado tanto, y desde entonces me queda todavía pendiente alguna entrada de Inglaterra, todas las de Escocia y ya se me acumulan las últimas relacionadas con mi última estancia en Venecia con puente de Calatrava incluido, he decidido esperarme al 30 del mes para empezar de nuevo, y así volver a empezar en la misma fecha que me lo dejé.
Han ocurrido muchas cosas en estos treinta días, casi todas buenas, aunque han habido de las otras, pero por suerte he podido continuar con mis viajes y trabajo, que no es poco en estos tiempos que corren... así que: "Como decíamos ayer..."