Edificio CaixaForum de Madrid

Uno de esos proyectos que tenía pendiente visitar en Madrid desde hacía un tiempo era este (imag01), obra de los mediáticos suizos Herzog & de Meuron. El CaixaForum situado en el céntrico Paseo del Prado 36, y que fue inaugurado el pasado Febrero, junto con la fachada verde que completa la plaza de acceso, y que es obra del botánico francés Patrick Blanc, esta aportación tan colorista ya tuvo que ser rehabilitada en su momento porque el fuerte sol español secó la obra!

El caso es que por fin pude acercarme y verlo por dentro, ya que durante su construcción había pasado alguna vez cerca. Lo primero que sorprende a cualquiera es la liviandad de los másicos muros de ladrillo de la antigua fábrica (imag02) que vuelan en su esquina de forma alucinante gracias a una estructura espectacular de vigas de acero de cantos increíbles de las que cuelga mediante cables el forjado primero, y que están más que presentes en la morfología de ese hall en planta primera, y que se intentan escamotear mezclándolos con el diseño del mostrador de atención y los muebles de la tienda que están todos colgando del techo (imag03), lo cierto es que el diseño futurista muy de los suizos en ese hall, unido a la escalera de acceso toda revestida de aluminio o similar material (imag04) hacen que el acceso a la sede social de la Caixa en Madrid sea espectacular, el interior y sus muebles recuerdan a otros proyectos de H&dM, como la biblioteca de Cottbus porque parece que siempre trabajan con la misma empresa de muebles y luminarias, pero en definitiva me parece un hall en planta primera muy a la escala del edificio que se propone. Y no contentos con darnos una escalera tan espectacular de acceso donde el pavimento se convierte en paredes, cuando uno empieza a adentrarse en las salas expositivas se encuentra con el segundo núcleo de comunicación vertical, que de nuevo deja boquiabierto a cualquiera que sepa de la dificultad de hacer una escalera en hormigón visto blanco con estas formas tan sugerentes (imag05), tras pasar por todas las plantas de exposiciones, se llega al final a la cafetería cuya luz queda tamizada por el acero corten de grosor sobrecogedor que es el que da la imagen del edificio al exterior, y que te hace sentir protegido en medio de un ruidoso Madrid a tus pies(imag06).
Sin duda, ha sido para mi el descubrimiento de uno de los mejores edificios del estudio suizo desde hace varios años, se dice que el mejor proyecto desde las bodegas de USA, no se si será para tanto, pero ciertamente me pareció espectacular, tanto el trato a la piel externa fabril, algo ya demostrado en la Tate o en Duisburg, pero también por unos interiores, menos banales que en Cottbus por ejemplo. Vale mucho la pena visitarlo y algunas de sus exposiciones también pero eso ya depende del tiempo que tenga cada uno, lo que está claro es que ha revalorizado más si cabe, esa zona de Madrid, y da una opción más en la zona de museos de la capital.