Este pequeño pueblo costero mediterraneo en la provincia de Gerona, ha sido una de las sorpresas positivas del viaje por lo inesperado del descubrimiento. Habíamos oído hablar entre algunos amigos en China que era pintoresco, pero no nos podíamos imaginar que lo fuese tanto.Es uno de esos pueblecitos mediterraneos con una pequeña cala pesquera (imag01) y algunas playas y calas naturales cercanas, hilvanadas por un precioso paseo junto a los acantilados (imag02) que te permite disfrutar de vistas increibles, y que une unos pueblos con otros aunque de manera intermitente.
Pasar el día entero por sus calles y playas fue un gusto para la vista en un día como el que nos salió. En sus pequeñas playas urbanas (imag03) la gente se agolpaba sin estar abarrotado, había una agradable tranquilidad entre el bullicio, y todo ello mientras unas calles más atrás el pueblo en sus paredes de cal blanca, se dibuja sobre el cielo azul entre iglesias y plazas, menos visitadas que sus playas (imag 04).A mi entender es uno de esos pequeños pueblos de costa menos conocidos por los turistas pero muy atrayente para los locales, un gran lugar donde perderse entre playa y buena comida, como toda esta zona de Gerona.
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