Visitando Venezia (continua...)

Además a modo de anécdota pero sobretodo como información de interés hay varios puntos del Gran Canal donde un servicio de góndolas te cruza de un lado al otro, por ejemplo desde el mercado de Rialto al otro lado es uno de ellos, y otro desde cerca de San Marco a la Salute cerca del Peggy Guggenheim Museum(imag01), un interesante museo nada parecido a los de Nueva York o Bilbao, cuya entrada son 10€.
Otros datos de interés en cuanto a moverse por Venecia, son que ir a visitar Burano y Murano lleva casi todo el día, y que en días de niebla se suspende el trayecto.
En definitiva, Venezia bien vale caminarla siempre, cada rincón es una apasionante aventura, y perderse o desorientarse es lo más habitual e interesante, y uno siempre se siente como en casa al leer CALLE por todas partes, una herencia de la dominación española de la ciudad en otra época.
Visitar Venecia es apreciar la soberbia belleza de la decadencia constructiva de una ciudad que lleva más de 300 años sin apreciablemente desarrollarse pero...
"...En Venezia la última gran idea urbana ha sido concebida en el primer decenio de este siglo cuando la ciudad ha escogido salir de su dimensión insular, al interior de la cual había desarrollado su propia modernidad por todo el siglo XIX. La conquista del borde del mar con la creación de la zona balnearia de Lido y la conquista de tierra firma con la creación del puerto industrial y la ciudad jardín de Marghera han relanzado a Venezia en una dimensión europea y han creado un modelo territorial que ha tenido un extraordinario valor urbano, contribuyendo a construir una ciudad de la excepcional complejidad y riqueza de oportunidades y articulaciones, que serían el resultado del juicio sobre el éxito actual de la misma..."

Este extracto sacado del libro: VENEZIA. LA NUOVA ARCHITETTURA de Marco de Michelis (ED. Skira), quizás sea un poco positivista porque como casi todo aquí los plazos se retrasan mucho más de lo normal, y hace que un proceso previsto para 5 años se desarrolle en 10, pero al menos se ve con satisfacción al ojear el libro que los planes están, que ya no es una ciudad a la deriva urbanísticamente y que hay muchas iniciativas por actualizarla a una manera que sólo Venecia puede hacer.