12 febrero, 2009

Shanghai primeros dias...

No hace mas de 48 horas que aterrice en esta ciudad impresionante, y no paro de asombrarme por todo lo que veo y la constante vida que tiene, el primer recuerdo que me viene a la cabeza paseando por estas calles son las míticas escenas nocturnas de Blade Runner, esa genial película que Ridley Scott dirigió, supongo, después de una visita a Asia, escucho sonidos similares, el mismo caos de circulación, y coches yendo y viniendo a diferentes niveles, aunque todavía sin volar(imag01).
Inmensos edificios repetidos una tras otra vez en cada calle, junto a otros menores donde claramente viven ciudadanos chinos que cuelgan toda su ropa de la forma tan particular en que lo hacen(imag02). Casi en cada esquina un oficio diferente, desde gente cocinando, otros vendiendo cualquier cosa, los que reparan bicicletas, puestos de frutas, de verduras, todo un inmenso caos en el que ellos si ven un orden y a nuestros ojos es sorprendentemente diferente y desconocido; cruzar una calle es una aventura, y enterarse de lo que te dicen una odisea, no es tanta la gente que habla ingles como dicen, pero su hospitalidad es tremenda e intentan siempre ayudar aunque de poco sirve para el que no los entiende, pero siempre te hacen reir aunque no te sacan de la duda!!
He dado ya mis primeros paseos por el Bund y la plaza del Pueblo, centro neurálgico de la ciudad, es todo un bullicio tremendo a todas horas y cuando cae la noche(imag03), Shanghai se transforma en una ciudad si cabe mas espectacular con luces brillando por todas partes, coches a toda prisa, y ríos de gente en metro y calles, intentando llegar lo mas rápido posible a sus casas. Ir en hora punta por el centro es toda una experiencia!!!

1 comentario:

dziga vertov dijo...

Hoy he leido este articulo en El Viajero...
http://elviajero.elpais.com/articulo/viajes/calles/inspiraron/Blade/runner/elpepisupvia/20090228elpviavje_4/Tes

Así que algo de razón tenia pero no toda imaginando que eran calles como las de Shanghai, según comentan aquí son las de Osaka las que inspiraron la película.