El Bund, que traducido es como presa de barro, era el dique que contenía el barro frente al río que se metía en la ciudad, hoy ya controlado y acotado a pesar de estar bajo toda la ciudad, es una de las zonas de mayor interés para visitar en Shanghai, dicen que los mejores momentos del día son primera hora de la mañana o la noche, y lo he comprobado esta misma mañana; ver el amanecer de esta tremenda metrópoli es espectacular desde este paseo situado al borde del río.
Lugar donde antiguamente atracaban todos los barcos que venían a Shanghai, y frente a los edificios mas interesantes de clara influencia europea, donde estaban las aduanas, las representaciones de otros gobiernos y hoy en día hasta las tiendas mas exclusivas de la ciudad. Es el marco perfecto para tener una perspectiva global de todo el barrio financiero de la ciudad en Pudong, aquella orilla del rio, ya que estamos todavía en Puxi, un extenso paseo de varios kilómetros de longitud nos recuerda que esta ciudad tiene muchísima vida no solo nocturna sino de transporte fluvial, y de oficinas que interaccionan con todo el mundo, y en una mañana de bruma pero calurosa como la de hoy, ver al fondo el conocidísimo skyline shanghaies con la Perla de Shanghai y algunas de las torres mas altas e imponentes del mundo asiático ha sido increíble.
Y en el recorrido he observado como los chinos se despiertan con ejercicios de Tai Chi por la calle en numerosos grupos de mujeres u hombres al ritmo de una música pausada y encantadora, muy lentamente despiertan cuerpo y mente, es todo un ritual digno de ver cada mañana en cualquier ciudad de China y por el contraste casi mas sorprendente aquí, las avenidas que por el día se abarrotan de gente a primera hora de la mañana son tomadas por la gente mayor principalmente pero también de mediana edad para hacer estos ejercicios, sin duda un encanto más del Bund y de Shanghai.
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