03 noviembre, 2009

Bohol, playas y descanso

En nuestro viaje si algo necesitábamos era algo de descanso alejado del turismo y del gentío, y eso nos lo proporcionó la isla de Bohol, aunque fuimos a la pequeña isla de Palawan, que es donde más playas hay, y por tanto gente..., aún con esas premisas disfrutamos de días tranquilos con todo lo que uno necesita, buena comida, buenas playas, buenos lugares para visitar y buenos precios, por tanto, como dice el cartel del mejor ron de Filipinas, Tanduay, (el litro a un euro), We Loved Bohol (imag01).
Esta isla bien merece disfrutarla, incluso más días de los que estuvimos si lo que se busca es descanso, porque ofrece de todo, en primer lugar unas playas paradisíacas preciosas (imag02), que además con la puesta de sol y todos los barcos atracados gana mucho más en calidez (imag03), pero no sólo eso, desde Palawan se pueden hacer excursiones a visitar islas cercanas para ver arrecifes de coral, peces de todos los colores o pequeños islotes sin gente, que al bajar la marea dejan imágenes espectaculares dignas de Robinson Crusoe (imag04). Además se puede hacer por el interior de la Isla, en una visita de un día, alquilando un conductor y su jeep, la visita a las conocidas montañas chocolate (imag05), que se llaman así por su forma y porque la mayor parte del año tienen tonalidad marrón. Otro de los momentos del día es la visita a los lugares donde encontrar a los monos Tarsier, la especie de mono mas pequeña del mundo (imag06), y que se llaman monos fantasma también porque por el día duermen y por la noche abren los ojazos desproporcionados que tienen y tienen una actividad frenética según dicen, además de estar capacitados para girar sus cabezas 180 grados, es una mezcla de búho, mono y rata, rarísima, una especie que sólo se encuentra en el Sureste Asiático. Otro de los momentos es un conocido puente (imag07) sobre el río en el que uno puede bañarse si el día acompaña, que esta hecho todo de bambú y de forma artesanal.
Como dije en otras entradas, las cenas pueden ser espectaculares junto al mar, y los albergues no cuestan más de 10 o 12 euros, siempre que no lo queramos en primera línea de playa, claro. Otras actividades habituales y recomendables son alquilar motos por día, y escapar por toda la isla, ir a un centro de deportes de aventura mas al norte de Palawan, o bien visitar alguno de los pueblos de la isla, muchos con nombres provenientes de ciudades españolas.

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