Uno 
de esos muchos hitos arquitectónicos de los que he hablado en Estocolmo es la Biblioteca Central de la ciudad, una maravilla proyectada por Erik Gunnar Asplund en 1928, y que posee uno de esos espacios siempre recordados en la arquitectura mundial, su hall principal con esa composición espacial y formal tan conocida por todos y que aparece en las imágenes01 y 02. El caso es que no podía sino volver a visitar ese lugar a mi vuelta a Estocolmo, esta vez el cementerio no podía
ir a verlo pero la biblioteca a modo de reverencia al maestro no podía dejarla. Y cual no será mi sorpresa, cuando me encuentro con el concurso internacional para su ampliación, me encontré en el hall principal con las 6 propuestas finalistas y la maqueta de la ganadora(imag03), tengo que decir que no es la que más me gustaba, pero de entre más de 1170 propuestas entregadas y según decían, uno de los concursos con más participación a nivel mundial de los últimos años, supuestamente es buena la opción. La mayoría de finalistas son suecos o de países nórdicos, pero curiosamente, la ganadora es una alemana de Weimar, casi toda la información se puede encontrar en la pagina de los arquitectos suecos, esta, y concretamente en el apartado de Asplund, este. Dan a 
DELPHINIUM la victoria porque crea una entera nueva composición con respecto a la biblioteca de Asplund. Otro de los puntos importantes es el contraste entre la eterna ligereza de la nueva propuesta con la expresión másica del edificio de Asplund, así como la riqueza de espacios y detalles, además el nuevo proyecto ofrece una muy buena solución a esa parte de Estocolmo e integra el parque en parte del edificio.
Las propuestas que a mi me parecen de mayor interés junto con la ganadora son la NOSCE TE IPSUM, BLANKET o DIKTHÖRNAN, pero sólo desde el punto de vista de las maquetas o imágenes 3d que planteaban al concurso, es difícil estudiarlas más pormenorizadamente.
De
todas maneras fue una de las grandes sorpresas del viaje en lo arquitectónico, porque además tenía obviamente un apartado especial en el museo de la arquitectura dentro del Museo de Arte Moderno de Estocolmo, un genial edificio proyectado por Moneo para la capital sueca y por el que ganó el Pritzker en su momento.
de esos muchos hitos arquitectónicos de los que he hablado en Estocolmo es la Biblioteca Central de la ciudad, una maravilla proyectada por Erik Gunnar Asplund en 1928, y que posee uno de esos espacios siempre recordados en la arquitectura mundial, su hall principal con esa composición espacial y formal tan conocida por todos y que aparece en las imágenes01 y 02. El caso es que no podía sino volver a visitar ese lugar a mi vuelta a Estocolmo, esta vez el cementerio no podía
ir a verlo pero la biblioteca a modo de reverencia al maestro no podía dejarla. Y cual no será mi sorpresa, cuando me encuentro con el concurso internacional para su ampliación, me encontré en el hall principal con las 6 propuestas finalistas y la maqueta de la ganadora(imag03), tengo que decir que no es la que más me gustaba, pero de entre más de 1170 propuestas entregadas y según decían, uno de los concursos con más participación a nivel mundial de los últimos años, supuestamente es buena la opción. La mayoría de finalistas son suecos o de países nórdicos, pero curiosamente, la ganadora es una alemana de Weimar, casi toda la información se puede encontrar en la pagina de los arquitectos suecos, esta, y concretamente en el apartado de Asplund, este. Dan a 
DELPHINIUM la victoria porque crea una entera nueva composición con respecto a la biblioteca de Asplund. Otro de los puntos importantes es el contraste entre la eterna ligereza de la nueva propuesta con la expresión másica del edificio de Asplund, así como la riqueza de espacios y detalles, además el nuevo proyecto ofrece una muy buena solución a esa parte de Estocolmo e integra el parque en parte del edificio.Las propuestas que a mi me parecen de mayor interés junto con la ganadora son la NOSCE TE IPSUM, BLANKET o DIKTHÖRNAN, pero sólo desde el punto de vista de las maquetas o imágenes 3d que planteaban al concurso, es difícil estudiarlas más pormenorizadamente.
De
todas maneras fue una de las grandes sorpresas del viaje en lo arquitectónico, porque además tenía obviamente un apartado especial en el museo de la arquitectura dentro del Museo de Arte Moderno de Estocolmo, un genial edificio proyectado por Moneo para la capital sueca y por el que ganó el Pritzker en su momento.
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