Es el principal pabellón de la Expo, el primero en terminarse y de los pocos que no se destruirá y quedará como un símbolo para la ciudad, como lo fue en su momento la Torre Eiffel, o las torres en Barcelona. Crea unas muy altas expectativas por su tamaño, y el número de visitas, pero para mi fue una paradoja bastante habitual aquí.
Puesto que las fotos del pabellón son las más conocidas, he preferido yo usar las cercanas e interiores. Por un lado en la parte arquitectónica, el pabellón es nefasto, me parece increíble la poca creatividad formal y espacial en un mastodonte de estas dimensiones, las fachadas son siempre iguales (imag01), lo cual no es sorpresa en una Expo, pero el primer problema es que no se distingue el acceso fácilmente (imag02), y la razón aducida es el control de acceso, aún así ese hall que podría dar un espacio fantástico, se transforma en un lugar de paso feísimo (imag03), y he aquí una gran duda, ¿cómo es posible que teniendo un posible vacío central de mas de 70m de altura, nadie haya pensado en aprovecharlo espacialmente?.
La sorpresa en este sentido llega cuando accedes al interior del pabellón y lo único con lo que te encuentras es con rampas por el interior pegadas a fachada(imag04), y con el espacio central ocupado por las salas y cuyas unicas vistas cruzadas en caso de haber son residuales a escaleras sin mayor interés (imag05).
Pero al menos uno piensa que la exposición será digna de recordar, puesto que el pabelón no aporta nada a a historia de la arquitectura china. Desgraciadamente me vine abajo al comprobar que los contenidos eran bastante insulsos y poco significativos, lo más bonito fue esta gran pintura china gigante en movimiento (imag06) en una de las salas, así que en líneas generales me lleve algo de decepción en el pabellón más visitado de la Expo.
Puesto que las fotos del pabellón son las más conocidas, he preferido yo usar las cercanas e interiores. Por un lado en la parte arquitectónica, el pabellón es nefasto, me parece increíble la poca creatividad formal y espacial en un mastodonte de estas dimensiones, las fachadas son siempre iguales (imag01), lo cual no es sorpresa en una Expo, pero el primer problema es que no se distingue el acceso fácilmente (imag02), y la razón aducida es el control de acceso, aún así ese hall que podría dar un espacio fantástico, se transforma en un lugar de paso feísimo (imag03), y he aquí una gran duda, ¿cómo es posible que teniendo un posible vacío central de mas de 70m de altura, nadie haya pensado en aprovecharlo espacialmente?.
La sorpresa en este sentido llega cuando accedes al interior del pabellón y lo único con lo que te encuentras es con rampas por el interior pegadas a fachada(imag04), y con el espacio central ocupado por las salas y cuyas unicas vistas cruzadas en caso de haber son residuales a escaleras sin mayor interés (imag05).
Pero al menos uno piensa que la exposición será digna de recordar, puesto que el pabelón no aporta nada a a historia de la arquitectura china. Desgraciadamente me vine abajo al comprobar que los contenidos eran bastante insulsos y poco significativos, lo más bonito fue esta gran pintura china gigante en movimiento (imag06) en una de las salas, así que en líneas generales me lleve algo de decepción en el pabellón más visitado de la Expo.