Cuando tomaba el pasado miércoles el avión en dirección a Brasília, esperaba pasar unos días de caminar mucho, ver grandes obras de arquitectura, y sólo encontrar gente por las calles preocupadas por el trabajo e intentando mantener el estricto orden de una ciudad marcada por su creación hace 40 años, en principio así fue... llegué al aeropuerto internacional, un edificio con más pena que gloria para recibir a unos turistas a los que la ciudad no está habituada... relativamente fácil encontré la posada, gracias a la extrema ordenación numérica de las calles de la ciudad, la dirección a buscar era: SQS707 BI Casa15,cuando lees cómo funcionan las calles allí es fácil de buscar, hasta entonces tiene pinta de jeroglífico, ésta es una ciudad donde todo está por sectores, tiene el sector bancario, el hotelero, el de hospitales, el comercial, el de clubes deportivos, el de colegios, y los sectores residenciales, y todos ellos tanto en Norte como en Sur, es una auténtica sorpresa ver cómo todo está ordenado... todo ello hacía que pareciera que la historia del viaje estaba ya escrita, mi primera tarde di una vuelta para hacerme con la escala de la ciudad, pasé por el Eje Central, la Rodoviaria, y de vuelta por el Parque de la Ciudad, donde vi los últimos 20” de la clasificación del Barcelona para la final de la Champions en un kiosco, en las condiciones que observáis... me fuí a dormir y al día siguiente llegaba en bus la otra intercambista de la Facultad, gracias a la llegada de Tete, todo cambió, fuimos a casa de una amiga de alguien conocido por ella, y ahí empezó todo a cambiar... vivía en un bloque en una de las Superquadras cercanas a la Rodoviaria, un apartamento espectacular, teníamos el alojamiento resuelto!!, nos fuimos a visitar el Eje Central, un auténtico espectáculo para la vista!!, todo el día caminando por los edificios de los Ministerios, la Catedral, los Palacios de Justícia y de Asuntos Exteriores, el Parlamento... y al acabar el día, para nuestra sorpresa estábamos invitados a una fiesta privada en una residencia del otro lado del lago artificial, en una casa espectacular, y donde nos encontramos de todo para cenar y beber!! allí conocimos a mucha gente, casi todos trabajaban en edificios del Gobierno, lo que al día siguiente, para nuestra sorpresa nos abrió todas las puertas de Brasília, el Tribunal Supremo no se podía visitar y el Ministerio de Justicia necesitaba ser reservado antes, así que tiramos de amistades, y acabamos por tener visitas personalizadas a ambos edificios, con un guía especial para nosotros, nos llegó a recibir el responsable del Tribunal Supremo de Medios de Comunicación para saludarnos, y comimos en el Restaurante privado junto con la gente que allí trabaja, no contentas con eso, nuestras Cicerones en la ciudad nos llevaron esa noche a un bar de música en vivo a tomar unas cervezas y conocer más gente, y al día siguiente de nuevo visitas a las superquadras, donde gracias a otro amigo pudimos ver una de ellas por dentro, y hay que decir, que es una autentica gozada ver algo así para un arquitecto!!, algunos templos más de la ciudad, incluso nos movimos en coche ese día, que ya era sábado, y esa ultima tarde todavía nos llevaron al mejor lugar de samba de la ciudad, el Calaf, y a la noche, como gran broche de oro a estos días en la capital, había actuación inédita de Gilberto Gil, el actual Ministro de Cultura y gran astro mundial de la música, de nuevo tuve la suerte de asistir a un acontecimiento histórico, Gilberto en Brasília por primera vez actuando, realmente increíble el concierto!! Así que no puedo más que agradecer el gran trato recibido, me fui con una gratísima impresión de la ciudad!!!
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